lunes, 6 de junio de 2011

El PSOE pide explicaciones a Rus y él mira hacia otro lado

El presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, ha decidido, al menos por el momento, mirar hacia otro lado ante el escándalo de las oposiciones de auxiliares y cerrar filas en torno al diputado de Modernización, José Manuel Haro, una persona considerada del entorno del alcalde de Xàtiva. El equipo de Rus estuvo ayer analizando la situación y optó finalmente por no pronunciarse al respecto. Fuentes del departamento de prensa indicaron que ni Rus ninguno de sus colaboradores tenía previsto hacer ninguna declaración ni tomar decisión alguna a cerca de la prueba.

Levante: Rus mira hacia otro lado y Rubio exige explicaciones

Desde la oposición, sin embargo, se reclamó ayer explicaciones a Rus. El portavoz socialista en funciones, Rafael Rubio, exigió al presidente de la corporación que "dé explicaciones y aclare las posibles irregularidades que pueden haberse cometido en la oposición convocada por la institución para cubrir diez plazas de auxiliar de recaudación". El portavoz socialista pidió a Rus que "comparezca públicamente para aclarar esta situación" porque, según ha asegurado, "si las sospechas se confirman, estamos ante un caso de extrema gravedad que pondría en peligro la imagen de la corporación como garante de la legalidad y de la igualdad de oportunidades".

Rubio explicó que, tal y como han denunciado los responsables de la Federación de Servicios Públicos de la UGT, las "dudas sobre la legalidad del proceso pueden paralizar la oposición" y animó al sindicato a llegar hasta el final para esclarecer lo ocurrido. Para el responsable socialista, "es bastante anómalo e incluso sospechoso que, en esta ocasión, el examen se haya impreso en la imprenta provincial, dependiente del departamento de Haro, cuando siempre se han fotocopiado en la propia Diputación". También considera sospechoso que algunos de los aspirantes que han aprobado con las mejores notas habían suspendido el año anterior con ceros. Por todo ello, Rubio recordó que cualquier administración pública deber ser "escrupulosa y cumplir con todos los requisitos para evitar todo tipo de dudas o sospechas con los procesos de selección del personal".